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miércoles, 5 de octubre de 2011

portugal

mis vacaciones de verano (¡qué lejanas! ¡y cuánto he tardado en escribir sobre ello!) las he pasado en parte en portugal. exactamente en nazaré. es una ciudad costera, turística, sin encanto pero bien comunicada con las zonas que queríamos ver. nos sirvió de base de operaciones y poco puedo destacar de ella excepto la parte alta, donde está el faro y magníficas vistas) y el restaurante taberna d'adelia, con mucho el mejor de la ciudad y donde recomiendo la caldereta de pescado (realmente buena). reservad antes o esperad más de media ahora
como no tengo mucho más que contar sobre la ciudad, os detallo donde estuvimos moviendonos con el  coche (sí, el combustible es mucho más caro que en españa; no, los portugueses no conducen tan mal)

  • aveiro: la llaman la venecia portuguesa, pero es mucho llamar, la verdad (aunque también tengan góndolas). hay un paseo bastante bonito desde el canal hacia la zona del ayuntamiento, donde han dado un lavado de cara a sus calles que les sienta realmente bien. la zona antigua también tiene su encanto, pero entre que llovía y que llevábamos en pie un montón de horas, no nos pareció una maravilla. comimos en o batel, un pequeñito restaurante ambientado como un barco, que nos gustó bastante

  • alcobaça: visita obligada por su monasterio cirtenciense, santa maría de alcobaça. magnifico se queda corto para definirlo: excelentemente conservado, puedes pasear por sus estancias y dejarte enamorar por su luz (id por la mañana, en domingo a ser posible). dentro del monasterio están las tumbas de pedro I e inés de castro y no te puedes ir sin ver ese trabajo minucioso y monumental (¡tened en cuenta que es una tumba!). no vimos mucho del resto de la ciudad (y nos quedamos con las ganas), pero la plaza del monasterio con sus terrazas en uno de sus extremos, te invitaban a quedarse durante todo el día observando el ir y venir de sus gentes

  • batalha: muy cerquita de alcobaça, batalha posee otro monasterio, santa maría de vitoria (en honor a la victoria de las tropas portuguesas sobre las castellanas en la batalla de aljubarrota; en realidad, el nombre de la ciudad viene de esa batalla) que no tiene que desmerecer al de alcobaça. en especial, sus capillas imperfectas (mala traducción del portugués al español; sería mejor decir inacabadas): el rey se quedó sin dinero y no pudo terminar de rematar una de sus torres. a parte de su belleza gótica, me pareció muy especial encontrarme allí, sin tejado y sentirme como si aún estuviera en obras y al día siguiente reanudaran el trabajo. os recomiendo comer en burro velho, a la salida de las capillas imperfectas: el arroz de marisco estaba realmente sabrosísimo y la ternera jugosa y en su punto (tardan bastante en servir, pero merece la pena)

  • tomar: de batalha a tomar (¡buff! es un camino bastante malo por carreteras secundarias), donde nos esperaba el convento de cristo, uno de los últimos monasterios del temple. llegamos justitos por la tarde pero (otra vez) mereció la pena el viaje y el calor. ¡enorme! tanto por tamaño (uno de los más grandes de europa) como por su sobria belleza, pasando de un claustro a otro y visitando todas las estancias (celdas, cocinas, etc) del monasterio. a destacar las vistas de la sierra desde la azotea y la ventana del capítulo, ejemplo excelso del estilo manuelino (allí aparece la jarretera, que despues daría nombre a la orden de la jarretera)

  • sintra: sí, es muy bonita sintra pero está saturada de turistas (también era agosto, vale) con lo que no pudimos disfrutarla al máximo. primero fuimos a quinta da regaleria, una villa que mandó construir un indiano en el siglo XIX. hay que decir que el hombre estaba un poco chalado, con lo que todo lo que construyó tiene un tipo de arquitectura modernista muy particular. pero es un privilegio perderse por sus jardines y encontrarte de repente con el pozo iniciático o con su capillita. un lugar maravilloso para dejar volar la imaginación en una tarde calurosa. depués fuimos (en autobús...no os perdáis el viaje) al castillo da pena. sin tener nada que ver con la quinta da regaleira, yo vi ciertas semejanzas entre ellas. creo que es porque el castillo es una mezcla de estilos(neogótico, neomanuelino, neoislámico...) que también le da el aire de cuento de hadas que tiene la quinta. la visita al castillo no aporta mucho pero es imprescindible para llegar a la capilla (¡menudas vistas!) y a la terraza del primer piso. no nos dio tiempo a hacer más y nos faltó pasear por las calles revueltas de sintra. pero lo dicho: muchos turistas


  • lisboa: aunque el plan era pasar dos días en lisboa, al final tuvimos que hacerlo en uno. obviamente, fuimos un poco al trote y no pudimos saborear la capital del tajo. pero esto es lo que hicimos: bajamos andando la avenida de la liberdade desde la plaza del marques de pombal hasta la estación de trenes do rossio (no entréis a verla: la fachada neomanuelina es preciosa, pero el interior es totalmente moderno); bajamos por la rua da prata (llena de comercios) hasta la praça do comercio (donde vimos la estatua de jose I y el arco triunfal, que nos llamó la atención porque estaba viriato) y desde allí, ver el tajo en todo su esplendor (realmente, es un mar que nace de una montaña); volvimos hasta el elevador de santa justa, que aunque tienes que esperar y la entrada (es subir en ascensor, no esperéis otra cosa) es cara, las vistas de toda lisboa merecen la pena desde su mirador; el elevador te deja en el convento del carmen, puerta del chiado, barrio tradicional de lisboa, animado y con comercios de vanguardia y donde está el café a brasileira, donde era un habitual pessoa (y hay una estatua que lo recuerda); anduvimos hasta la casa dos bicos (con su fachada de piedras talladas en forma de diamante) y comimos en a tasca da sé (por fuera no parece gran cosa, pero os lo recomiendo para comer un muy buen bacalao y beber su café con chocolate); después de comer, nos acercamos hasta la (está al lado), pequeña y acogedora catedral de estilo románico que encandila por su sencillez; como estábamos por allí, paseamos por la alfama, el barrio populoso y bohemio de lisboa (¡incluso oímos fados!) por la calle de los anticuarios; como estábamos realmente cansados, cogimos uno de los famosos tranvias amarillos lisboetas para enlazar con otro más moderno (¡sin aire acondicionado!) que nos llevó a belem para ver el monasterio de los jerónimos: si he alabado los monasterios de tomar, batalha y alcobaça, me quedo sin palabras para describir los jerónimos; sólo puedo decir que su claustro (seguramente) es uno de los más bonitos del mundo: tenéis que verlo aunque solo sea una vez en la vida. dejamos muchas cosas por ver en lisboa, pero la impresión que me dejo es que es una ciudad más viva y moderna de lo que se cuenta por ahí


  • obidos: es un pueblo amurallado que conserva su aroma histórico (aunque perdió gran parte de sus edificios en el terremoto de 1755). estuvimos dando vueltas por sus calles y plazuelas e incluso subimos a recorrer su muralla (nota para los que sufrimos vértigo: una vez que te subes, no puedes bajar hasta que no la recorres casi entera; ¡lo pasé fatal!). obidos es un buen lugar también para hacer las compras de productos típicos ya que tienes de toda clase y condición (sobre todo encajes y porcelanas). también compramos unas botellas de ginja, un licor muy dulce hecho de cereza.en obidos no parareis de hacer fotos a rincones especiales o a casas cubiertas de flores

  • san martinho do porto: unos compañeros portugueses me lo recomendaron pero ya habíamos elegido nazaré como centro de operaciones. he de decir que nos equivocamos. aunque san martinho es también un pueblo costero turístico, allí todo parecía tener otro nivel. su playa es extensa y tiene la suerte de que el agua es templada a diferencia del resto del atlántico (gracias a que está justo debajo de la nariz del mapa portugués). sus edificios son más modernos y todo está más cuidado que nazaré. incluso tienen algunas casonas antiguas que realmente le da a esta pequeña ciudad un encanto muy especial. si volvemos por la zona en verano, este será nuestro campo base 


 como habréis leído (si es que habéis llegado hasta aquí), portugal es un país que tiene encanto, algo que lo hace especial. la gente es muy amable (aunque no lo parezca al principio) y siempre te va a sacar del apuro. solo un par de cosillas más:
  • toda la comida está muy salada y muy hecha comparada con la de españa. esto nos llama la atención a los amantes del pescado, que siempre tendemos a comerlo poco hecho. pero es acostumbrarse (a lo salado, no, no te acostumbras)
  • sí, el bacalao está buenisimo. en todas sus variantes y en todos los restaurantes. también los arroces (en especial el tamboril, con todos los mariscos que encuentres) les salen muy bien en esta zona de portugal
  • los entrantes: cuando te sientes a la mesa veras que te han dejado encima unos panecillos con mantequilla, crema de anchoas, aceitunas, etc. no es un regalo, solo son los entrantes (te los cobrarán, 2€ por cabeza)
  • coged siempre autovías o autopistas: los españoles no estamos acostumbrados ya a las carreteras nacionales y son un suplicio. no son muy caras
  • si veis a viejecitas en las carreteras cerca de la costa con un cartel, no os asustéis: alquilan habitaciones a turistas y no se les ha ocurrido otra manera de darse a conocer 
estuvimos en el hotel miramar y os lo recomiendo si queréis tranquilidad y estar alejados del bullicio. está en el barrio alto y no oiréis ni una mosca. la piscina cierra tarde y es muy divertido desayunar con dos gaviotas esperando a que les des comida en la terraza. lo peor es el restaurante, caro y malo y que no tiene piscina climatizada como nos habían dicho (en realidad sí la tiene el otro hotel miramar, de la misma cadena, a unos 2km a las afueras del pueblo; id en coche (no andando como nosotros)

sábado, 22 de enero de 2011

estambul

esta nochevieja he estado en estambul. buscabamos dos cosas en mi viaje y sólo encontramos una: queríamos apartarnos de las celebraciones típicas (la única tradición que no me quería perder era la de las uvas...y me la perdí. me tuve que conformar con los doce frutos secos de la suerte) y efectivamente no vimos la jarana que se puede ver en cualquier ciudad español; y quería tener buen tiempo....pero no lo tuve. ¡menudo frió hay en estambul! cuando tomamos la decisión de ir a allí era agosto y el calor nubló mi mente

no voy a empezar a desglosar todas las maravillas de estambul. eso lo podéis mirar en cualquier guia (os recomiendo la página de turismo de turquía y este blog, pero hay muchos; buscad y encontrareis). lo que si que quiero es dejaros mis impresiones sobre la ciudad del bósforo

  • sólo visitamos la parte europea de la ciudad (dejamos para otra ocasión la parte asiática) y estambul se muestra como una ciudad occidental: grandes avenidas, trafico, centros comerciales, etc. podría pasar por una ciudad centroeuropea. otra cosa es que no sé si la parte europea de la capital representa a todo el país: me temo que no, ya que vimos a otros turcos que iban de excursión a estambul y eran muy diferentes a los de estambul (largas barbas, gorritos árabes, bombachos...). por cierto, ningún problema con la religión. es mas, me gustaba mucho ver los minaretes y oírlos orar
 
  • los habitantes de estambul son amables y cordiales. no hemos tenido ningún problema ni siquiera un mal gesto. en honor hay que decir que nosotros estuvimos en el meollo de la parte mas turística de la ciudad y todo esta enfocado al turista, pero me parece que el turco es amable por naturaleza

  • hemos acabado hasta el gorro del kebab. esta riquísimo, en efecto. pero la sobrexposicion a las moles de carne es constante. prefiero el de pollo, sobre todo a la brasa, que el cordero, no tan joven como en españa y con un sabor muy fuerte. los dulces, riquísimos pero un poco empalagosos. probad el té turco (muy bueno) y cuidado con el café turco: es muy fuerte. mis recomendaciones son restaurantes sar (hay varios, nosotros ibamos al de beyazit; la web engaña un poquito) si quieres comer rápida, barato y bien;  y house of medusa, para una comida un poco más elaborada (si no puedes ir a estambul, visítalos en zaragoza, en la calle argensola, aunque aquí solo dan bocadillos). resaltar un vino blanco turco muy bueno, çankaya, del que nos hemos hecho fans (aunque todavía no lo hemos encontrado en españa). por cierto: cuidado con los precios, preguntad sin miedo para que después no suba la cuenta mas de la cuenta

  •  nos gustó más santa sofía que la mezquita azul (en broma, decíamos que como es más nuestra, la entendemos mejor). realmente la mezquita azul me dejó un poco frío. impresiona más ir acercándose a ella que estar dentro de ella. aunque no quiero decir que no merezca la pena la visita. los azulejos que le dan nombres son magníficos. en cambio, santa sofía si que me gustó mucho: cómo el arquitecto hizo que 'flotara' la cúpula asombra y el recorrer todos sus rincones, aunque sea con un turismo tan masificado, gustará a todo el mundo

  • no podéis dejar de hacer el crucero por el bósforo. elegid el de dos horas (el viaje de seis tiene que ser un poco aburrido) y disfrutad de las vistas de las dos orillas, de las dos culturas, del cuerno de oro. en este crucero (no esperéis unos barcos de postal, más bien son barquitos de recreo) viví el momento más mágico del viaje: escuchad las llamadas de la oración desde las dos partes de la ciudad, la occidental y la oriental (echo de menos ese sonido). si no hay niebla, veréis a lo lejos asia

  • si queréis ver todo estambul, tendréis que subir la torre gálata. ¡menuda caminata nos dimos ese día! pasas por el puente del gálata el bósforo (con todos los pescadores apiñados para conseguir los 'mejores' pescados) y subiréis, subiréis, subiréis hasta llegar al barrio de beyoğlu , el mas bohemio de la ciudad. pero merece la pena la subida y la espera por las vistas, lo ves todo. topkapi, el palacio del emperador, es una visita imprescindible para cualquier visitante. es enorme y preciosas todas sus salas. hasta la mas pequeña, hasta la que utilizaban para la cosa mas tonta, es una maravilla. lo único malo son las personas de seguridad: su 'quiqui, quiqui' (en lugar de quickly, quickly) fue la coletilla del viaje


  • el tesoro escondido de estambul es su museo arqueológico. amplísimo (no pudimos verlo todo) y casi tan rico como el de atenas. desde la tumba de alejandro magno hasta las ruinas de troya, todo un recorrido indispensable por toda la historia de la zona (imperio persa, romano, griego.....). la historia del mundo, vamos. y la gran decepción la cisterna basílica: no merece la pena para nada pagar la entrada para ver el lugar donde almacenaban el agua en estambul. a mis compañeros de viaje no les gustó nada y les pareció una tomadura de pelo. a mi solo me hizo gracia porque allí rodaron algunas escenas de desde rusia con amor (soy un fan empedernido de 007)

  • donde mejor lo pasamos fue en el gran bazar. ya se sabe que viajando se conoce a las personas, pero no sabia cuanto. descubrí que mi novia fue en otra vida una comerciante persa: regateaba por todo y con muy buena fortuna. aunque el regateo es parte esencial del bazar. es enorme, indescriptible, un laberinto de pequeños puestos de cualquier cosa: alfombras, lamparas, ropa.... famosas son sus replicas de ropa y relojes, algunas muy muy buenas. tan buenas, que ciertos famosos y empresarios (no daremos nombres) compran allí los bolsos y relojes que lucen en las revistas. reservad un día entero y una maleta para todo lo que vais a comprar (por cierto, falsifican hasta cosas de zara)

  • estambul nos derrumbó un mito: roma no es la república de los gatos, ¡es estambul! no se cuantos habrá, pero si digo que había un par de gatos en cada esquina, no exagero en absoluto. además, la gente los trata muy bien y les tiene preparadas la comida y el agua, incluso en algunas tiendas hay un cojín para ellos. vi a un señor coger un gato y llevarlo por toda la calle hasta que lo dejo en su tienda. además, son muy guapos

  • se me olvidaba deciros donde estuvimos alojados: barceló saray. hotel moderno aunque no es realmente un 4*, si no un 3* superior. tienen servicio de masajes y hamam en el mismo hotel. lo mejor, la situación: enfrente del bazar y a 10 minutos andando de santa sofía y la mezquita azul

en resumen, una ciudad bulliciosa y amable, orientada al turismo, con grandes monumentos que visitar y donde no te puedes aburrir. merece la pena. nosotros ya estamos planeando el próximo viaje a estambul (porque nos perdimos muchas cosas)....¡pero con una maleta vacía!

miércoles, 29 de diciembre de 2010

gastrolista 2010



he leído en el país un reportaje sobre lo hitos del 2010 en gastronomía. pues bien, ahí van mis comentarios
  •  la cultura de la tapa: parece mentira que nos tengamos que sorprender de que fuera de nuestro país, el pincho guste. ¡pero si es uno de los auténticos inventos españoles! cada día son mejores y más elaboradas (a veces, hasta cuesta encontrar un tapa de jamón sin nada por encima). el peligro es, como siempre, el timo de la estampita: en madrid, le pones a un bar un nombre vasco y ya pueden doblar el precio de las tapas (¿por qué en madrid, a la tapa de cangrejo la llaman txaca?). las mejores ciudades para tapear: bilbao, zaragoza y zamora (san sebastián es un bluf)
  • reciclaje de elbulli: tanto va el cántaro a la fuente que al final se rompe. es propio de héroes griegos lo que estaba haciendo adriá: cada año, superar su marca personal. creo que era necesario para él este respiro y volverá con algo nuevo y sorprendente (lo que todos le pedimos, claro). una pena porque no me va a dar tiempo a ir a elbulli 1.0....pero ya estoy deseando conocer lo que va a hacer en el futuro
  • entronización de la comida nórdica: confieso que soy un neófito de esta gastronomía. los recuerdos que tengo no son del todo agradables, pero como en todo, hay que probar el sitio adecuado. este será uno de mis propósitos 2011
  • patrimonio de la humanidad: ¿a quién le cabe duda que la dieta mediterránea es la mejor? y no lo digo sólo por sabores y texturas, si no por el bienestar que causa al cuerpo. es un lujo vivir donde vivo y tener toda esa variedad de carnes, pescados, verduras, hortalizas.....
  •  el reinado indiscutible de los cócteles: ¿se quedará en moda? me hace gracia comprobar como gente que hace unos años pedía un 'cubata', ahora exige que el gin tonic sea de tanqueray, con limón exprimido y tónica tal....en un pub a las 3h de la mañana. cada lugar tiene su propio coctel y me parece estupendo que vayamos formando el paladar al licor. pero seamos sensatos: un buen gin tonic hay que beberlo cuando hay que beberlo
  • glamour envasado: recuerdo los programas de cocina de mi infancia (sobre todo, con las manos en la masa). y no tengo el recuerdo de que el aceite no estuviera en su botella. ahora, cualquier cocinero (hasta tu vecino que se compró ese libro de cocina en el vips) tiene el aceite en un cacharrito especial que lo echa como si fuera un chorrito. pues nada, mientras siga la moda, seguirá
  • vinos con alma: no entiendo de vinos y sólo me gustan los que me gustan (curiosamente, los más caros). así que poco puedo decir al respecto. pero como muchas cosas, la moda llegó al vino y el vino la abrazó (los bodegueros, más bien). mientras todo esto sirva para hacer mejores caldos, chapeau
  • naturalismo culinario: como soy un amante de los sabores y del producto de calidad, estoy encantado con toda esta fiebre de los alimentos naturales y sin añadidos. que siga, que siga, por favor. pero cuidado con tener que pagar el triple por una borraja 'ecológica' sin que me den pruebas de que lo es
  • comida sobre ruedas: vivo en madrid y no he visto esos restaurantes sobre ruedas de los que todo el mundo habla en estados unidos. ¿por qué no se han extendido en españa? tenemos buen tiempo, así que podrían arraigar. pero claro, también tenemos algo que los americanos no aprecian tanto como nosotros: la sobremesa. ¿o tendremos que hacerla sentados en un banco en el retiro?
  • estrellas y sucesos: nuevas estrellas en el firmamento culinario. a ver si duran tanto como adriá (por ejemplo) o aduriz (increible que en tan poco tiempo volviera abrir; se merece un aplauso) 
(gracias a rosa rivas por el reportaje que me ha servido de base para este post. estoy un poco vago ultimamente, pero bueno...)

viernes, 10 de diciembre de 2010

cinco cosas que me ahuyentan de un restaurante

  1. el cambio climático: en invierno es raro que en un restaurante haga tanto calor que haya más agua en mi frente que en mi vaso. pero en verano si que padezco más el aire acondicionado. sobre todo cuando te sientan justo debajo de la salida del aire y no tienes posibilidad de cambiar de mesa. en ese momento, casi siempre acabas jugando a las sillas: todos corremos para no coger esa silla. pobrecito al que le toca
  2. tanto, tanto ruido: debería hacerse una estadística de cuantos platos, copas, cubiertos, etc. se caen al suelo en un restaurante cada cinco minutos. nos asombraríamos. también están las voces de los camareros (de barra, principalmente). muchas veces me ayudan a decidirme por un plato: espero un par de minutos y elijo el plato más oído. y aunque no tienen la culpa directamente, me pregunto yo por qué narices tengo que escuchar las conversaciones de los demás. aunque hay ocasiones que esta práctica tan española ayuda a romper el hielo en tu mesa (si tus acompañantes no son muy habladores)
  3. el que espera, desespera: aunque soy fumador, no suelo fumar entre plato y plato (casi nunca). pero voy a empezar a replanteármelo en algunos sitios. me daría a tiempo a ir al estanco, volver y fumarme un cigarro. el camarero no habría llegado aún. comer también tiene su tempo y lo que se consigue tardando tanto es que a uno se le quiten las ganas de comer. ya imagino que no será la intención de nadie, pero es un detalle para mi esencial
  4. comunicación fiable: si yo le pregunto a un camarero por los ingredientes de un plato, espero que me diga exactamente todos los ingredientes de un plato. soy un poco 'especialito' comiendo y no me gustan las sorpresas (desagradables). me suele ocurrir en los italianos: pregunto por la salsa de tomate (atención: sal-sa-de-to-ma-te). el camarero, muy inteligentemente, me dice que lleva tomate. perfecto: espero una salsa de tomate. pero, ¡sorpresa!, la salsa lleva cebolla. ¿por qué no me dijo el camarero que tenia cebolla la salsa de to-ma-te? repito por si no ha quedado claro: tomate. si esto me ocurre con algo tan básico, imagináos lo que puede ocurrir con un plato más elaborado
  5. sólo cinco minutos más: acabas de comer y quieres estar charlando unos minutos con tus amigos mientras tomas un café o saboreas el postre...pero un camarero te empieza a echar miraditas por encima del hombro. he dicho miraditas pero debería decir miradas asesinas. a los 30 segundos de traerte el café, aparece como una exhalación con la cuenta. pero, ¿es mucho pedir qué me deje estar sentado en su local durante unos minutos? ¿tanto le erosiono la silla? cuantas veces no me habré levantado con la cucharilla todavía en la boca para ir a pagar

jueves, 9 de diciembre de 2010

mis salsas favoritas para pasta

gricia
ingredientes (para 4 personas)
 
150 gramos de panceta de cerdo curada (no ahumada)
100 gramos de pecorino rallado
pimienta negra molida
aceite virgen extra
 
en una sartén, vierte el aceite y añade la panceta, cortada en trozos pequeños, hasta que quede dorado. cuece la pasta sin sal (el pecorino ya tiene bastante sal). cuando esté lista, vierte la pasta en la sartén y mézclala bien con la panceta. después, añade la pimienta negra y el pecorino para que mezcle todo bien

 
pesto
ingredientes (para 4 personas)

100 gramos de hoja de albahaca

1 diente de ajo
50 gramos de piñones
2 cucharadas de queso parmesano

aceite virgen extra
sal
lava las hojas de albahaca y sécalas con cuidado con un paño. machaca la albahaca junto a la sal; despues añade los piñones y más tarde el queso para que todo quede perfectamente amalgado. vierte lentamente el aceite de oliva para que la salsa no quede muy espesa


carbonara
ingredientes (para 4 personas)
150 gramos de panceta curada (no ahumada)

100 gramos de queso pecorino

10 gramos de pimienta molida

4 huevos

aceite virgen extra


corta la panceta en trozos pequeños y bate los huevos con la pimienta. fríe en una sartén la panceta hasta que quede dorada. vierte la pasta cocida en la sartén y mézcla muy bien con la panceta. tras unos 5 minutos, quítala del fuego y vierte los huevos hasta que forme una crema. después, añade el pecorino y vuelve a mezclarla hasta que quede perfectamente amalgada



funghi porcini
ingredientes (para 4 personas)

1kg de boletus

500 gramos de tomates cherry

1 vaso de vino blanco

1 diente de ajo

aceite virgen extra
sal

pimienta


limpia las setas con un paño húmedo y córtalas en trozos. en una sartén a fuego lento, dora el ajo bien picado con un poquito de pimienta. después, añade los boletus durante unos 5 minutos. vierte el vino blanco y tapa la sartén hasta conseguir una cremita suave. añade después los cherry y añade la sal. vuelve a tapar la sartén y a fuego muy lento durante 15 minutos, removiendo para que mezcle bien. después, añade a la sartén la pasta cocida para que acabe de mezclar




putanesca
ingredientes (para 4 personas)

500 gramos de tomate triturado

80 gramos de anchoas

100 gramos de aceitunas negras

50 gramos de alcaparras

1 dientes de ajo

1 guindilla cayena

aceite virgen extra

oregano

 
en una sartén con aceite, vierte el ajo y la guindilla (sin que se doren). después, añade las anchoas cortadas (reserva algunas) y aceitunas cortadas (muy pocas). sofríe a fuego lento, revolviéndolas hasta que se queden como un cremita. añade el tomate, tapa la sartén y aumenta el fuego. cuando empiece a hervir, redúcelo a fuego lento para que se vaya espesando la salsa. vierte la pasta cocida, junto al orégano, las aceitunas (troceadas) y las alcaparras. al final, añade el resto de anchoas



puedes ver las recetas en italia auténtica o en italian food forever